El libro de un hombre solo (一个人的圣经) es una de las novelas más representativas del premio Nobel de literatura Gao Xingjian, juntamente con La montaña del alma. Es una novela autobiográfica que se adentra, desde la distancia del recuerdo, a lo que vivió sobretodo en la China de Mao Zedong y durante la Revolución Cultural, antes de que se instalara en Francia.
Sin ideales, sin mujer, sin hijos, él es un hombre solo que mantiene silenciosas conversaciones consigo mismo en habitaciones de hotel de distintas ciudades, acompañado siempre de hermosas mujeres con las que apenas tiene relación más allá de breves encuentros eróticos. Él es ahora un reconocido artista chino exiliado que evoca los años en los que inició una batalla perdida contra el adoctrinamiento y la masificación.
En El libro de un hombre solo los recuerdos del autor los relata en tercera persona, y la narración de su presente a distintas ciudades occidentales y orientales están escritas en primera persona; desdoblamiento que pone de manifiesto la necesidad de distanciarse de los recuerdos, a menudo demasiado dolorosos, que le provocan las experiencias de la China comunista, y la voluntad de comprender esa persona que fue, sin llegar a ser un juez de sus actos ni un simple espectador indiferente. Es una novela cruda, que aleja al lector de todo idealismo revolucionario; el pragmatismo, la lucha para la supervivencia, en un país donde domina el totalitarismo y la miseria, los traidores y espías, los temerosos y arribistas se convierten en el reverso más real del ideal.
La multitud de personajes que pueblan el libro, a pesar de estar retratados parcialmente, casi los puedes sentir respirar a momentos, su sufrimiento y su desconsuelo esta tan bien perfilado, que el paisaje de la China de Mao Zedong no podría existir sin el testimonio de un hombre, amante de la literatura y la libertad, como Gao Xingjian. La escritura en esos años de sumisión se convierte en la única forma de aspirar a la dignidad humana que le queda, a un hombre que va perdiendo familia, amigos y amantes, en un país donde las relaciones personales están sometidas y perseguidas por el ideal del partido, convertido en un simple eslogan para no perder el poder o llegar a él. Como consecuencia, el autoretrato de Gao Xingjian prescinde de todo idealismo, un retrato sencillo y crudo, que explora las partes luminosas y también las más oscuras, y al fin, solo queda, la expresión del deseo de vivir, casi sin voluntad, en el instante presente que es el único que lo puede liberar del dolor.
Como telón de fondo de los recuerdos del autor encontramos los acontecimientos más importantes de la china contemporánea: la invasión japonesa, la guerra, el entusiasmo socialista, la represión a los intelectuales y artistas, los experimentos radicales de las comunas, la revolución cultural, las reformas del liberalismo económico. Una novela muy recomendable, sobretodo para los amantes de la historia desde la perspectiva de quién la vive a pesar que no la escribió. El libro de un hombre solo, no obstante, contiene una belleza difícil de definir, una poesía trágica y esperanzadora a la vez, que se aleja de criticas o quejas, de rencores o remordimientos, para dejar paso a la vida que se libera al fin.